martes, 24 de noviembre de 2015

Estás aquí


Amor estás aquí
lo noto en la transparencia 
del respiro,
en el aroma del susurro,
aflora de mi un color nuevo,
alborea sobre mi tez
la luz de tu poder,
miro la amplitud que es 
contigo la habitación,
mensajera valiente,
humilde entre mis brazos,
me hace falta tu presencia
tragándose mi optimismo.

Sin ti, desierto en pos de lluvia 
siniestras puertas batientes,
mesas lanzadas a la ausencia,
lo que de noche atrapa.

Pero no amor,
tu estás aquí
dándome transpiración 
y sueños
cielo y hombre,
espacio y el tiempo que pido,
volviste a mirarme,
regresaste a poblarme
y a romper las circusntancias en risas

para que el dolor no duela
ni la danza pierda el ritmo.  







 
 

jueves, 19 de noviembre de 2015

Tu amor es nuestro



Tu amor es como un maestro
con vocación de servicio.

Con esa ternura que es nuestra,
me alzé para ser forma entre tus brazos
patria, nervio, lamento,
temporal, cruce, recodo
bandada al aire,
gesto en silencio.

De tanto cariño  que recibo
mi existencia es un bosque
en medio del ardiente desierto,
versos, todos los vientos,
del universo emergí a tu entusiasmo
cuarzo fiel como la evidencia,
fulgor que trova a la falda del cerezo,
canasta de frutas silvestres,
tu amor es como todas las constelaciones
no alcanzo a cifrar lo que das,
es perspicacia y color el aporte
de mi no vino nada, de tí toda la entrega,
mas tu amor es nuestro.















 
 

lunes, 16 de noviembre de 2015

Tú y yo


Íntegramente conminado
al lapso filudo que corta
ayer, de mañana,
reflejos, de sombras largas,
escuchar, de oirme en el silencio,
traer, de lo que tengo, 
conciencia mansa, 
de inteligencia vivaz.

Entre tú y yo hay
un intervalo que exige,
más vida de la vida.

Y acarrea el amor 
bajo los acordes coloridos
de la templada tarde,
sobre esa piel de menta
y el agua limpia de tus labios,
donde se inunda la voluntad,
y se transfigura la savia,
donde el intervalo se convierte
en cuatro párpados plegados
para ver más allá
de donde se clavan las uñas 
o se muerde la carne.
¿Tal vez para ver
A dónde vendrán los que vienen,
cuando el ayer es mañana
y el mañana no termina de irse?




 

 






 



 








 







jueves, 12 de noviembre de 2015

Al encuentro



No tengo nada más que tú
viniendo a mi encuentro,
a ese venir lo acompaña
la luna que tiene suspendido 
al océano de tus ojos
entre dardos de silicio literario.

Dorado trigo de la tarde
conoces el frente y el reverso
para hacer de uno mismo, 
hogaza partida.
Profecías de pétalos en almíbar,
tradición paulatina 
de cosas naturales,
somos un solo cuerpo
envuelto en el aroma que emanas
reacción en cadena infinita.

De tus entrañas
manantial fresco,
satisfaces mi sed 
junto al silencio del parque,
donde brilla la flor del cosmos.

El mar no sería el mismo
sin las gotas saladas de tus ojos
que lo llenan de tu corazón.

Tu rostro le pertenece al humilde,
al extenuado, al caído.
Yo pido la lavanda dentada
de tus huellas y la riqueza de tu amor.

Yo veo la luz bajo tus párpados
que me viste de claridad,
y me abrigan los versos
que de tus venas brotan,
aún cautivo de mi.

Mi melodía regresa en vendaval
lapso de lluvia bondadosa,
Suena guitarra y voz,
despierta canción azul itinerante
que contigo despertará la aurora. 





















Luna de flores

En conjunción la luna, el ulular de la lechuza, las buganvilias de color abstracto,  su torso de hogaza y la noche de barro. Las translúc...